El bostezo: tímido placer, sobre todo si se le es observado hasta el punto de apenarse y esconderse entre las muelas, esperando un descuido del mirón para salir despavorido abriendo puertas y ventanas. Pero ahí no termmina esto, al momento de salir se convierte en un antagonista de su ser, de manera sociable, invita a otros espectadores del bostezo y anima de manera irresistible a una burbujeante ola de bostezos, ya en confidencia hasta alguno de ellos se atreve a salir con ruido o una cristalina lagrimita.
Los bostezos gozan de gran humor y suelen ser irreverentes ante los momentos más fastuosos delatando al portador
También son muy ociosos y cuando el silencio se presenta salen uno a uno para darse de piruetas
Pero lo que mas los identifica es cuando tienen sueño y te avisan que ya es hora de dormir.